La vida es difícil y no basta con ser gracioso


Gary Wayne Coleman (8 de febrero de 1968, Zion, Illinois, US - 28 de mayo de 2010, Provo, Utah, US) fue un actor estadounidense que obtuvo fama y reconocimiento en su niñez.

Nació con una enfermedad congénita del riñón que terminó causándole nefritis (una destrucción autoinmune del riñón), hecho que detuvo su crecimiento a una edad temprana llevándolo a desarrollar una estatura pequeña: 1,40 m (4' 8") lo que se convirtió en su característica más distintiva. Coleman tuvo dos trasplantes de riñón, uno en 1973 y otro en 1984, y requería diálisis constante.
Durante los ocho años de emisión del sitcom estadounidense Blanco y Negro (Different Strokes) ("Arnold", en Colombia, España y Uruguay), fue visto por millones de televidentes en todo el mundo de la década de los 80, siendo uno de los más vistos en la historia de la televisión; su personaje se caracterizaba por la famosa línea que era "¿De qué estás hablando, Willis?" o "Kimberly" según el caso de quien se tratase.("what'chu talkin' 'bout, Willis?") Gracias a esta fórmula que causaba simpatía, Coleman fue una figura popular, protagonizando algunos largometrajes y películas de televisión incluyendo On the Right Track, y The Kid With the Broken Halo. The Kid With the Broken Halo finalmente sirvió como la base para que Hanna-Barbera produjera la serie animada The Gary Coleman Show de 1982.
En el punto más alto de su fama con Blanco y Negro, Coleman ganaba U$S 70,000 por episodio que cobraban sus blancos padres adoptivos, de profesión cristianos fundamentalistas y sumamente exigentes con el pequeño que se había convertido en una mina de oro bendecida por el Señor... Como creció, aun a pesar de su problema, el favor del público no siguió acompañándolo, porque no es lo mismo un negrito gracioso que un enanito con barba que se asoma. Después de la cancelación del show que le llevó a la cima, su carrera artística decayó repentinamente, y nunca pudo recuperarla ni siquiera en los últimos tiempos en los que todo el mundo sabía de sus dificultades. Para colmo, los buenos cristianos de sus padres adoptivos misteriosamente perdieron todos los ahorros (quizá hayan dejado de pagar con puntualidad los diezmos y el Señor se irritó con ellos) y el muchacho debió ganarse la vida como parking-boy tratando de ejercer su seducción de niño para aumentar sus propinas. Coleman volvió por un tiempo a ser famoso cuando demandó a sus padres adoptivos y a su manager por la apropiación indebida de su fondo fiduciario de U$S 9,5 millones, de los que recibió U$S 1.280.000 con el fallo del 23 de febrero de 1993. El origen del pleito era que sus padres en connivencia con su representante habían utilizado el fondo del fideicomiso para ellos mismos, dejando en el banco solamente $60.000 para quien producía el dinero. En 1999 Coleman se declaró en bancarrota y atribuyó sus problemas financieros a la mala gestión de sus fondos.
Estuvo casado con la pornostar Mary Carey unos meses, debido a que ella lo demandó por abuso y maltrato.
Falleció el 28 de mayo de 2010 luego de varios días en coma tras una caída en su casa que le provocara una hemorragia intracraneal. Tenía tan sólo 42 años.

1 comentario:

PATO08 dijo...

HAY BARON , QUE TRISTEZA UNA VIDA LENA DE AMARGURAS
QUE DESCANSE EN PAZ