Primero era el chancho, hoy es el pollo


Parece que a los líderes populistas de este continente generoso les preocupa sobremanera la comida. La presidenta argentina Cristina Fernández sorprendió hace unos días con sus conocimientos esotéricos sobre la carne porcina, declarando que este alimento aumenta la libido. También, entre rubores propios y otros resultado de su pesado maquillaje casi teatral, la señora sugirió que habría tenido un fin de semana excepcional en su refugio de El Calafate gracias a esta dieta, pero que "Néstor" -el consorte- seguramente se molestaría con estos comentarios. En definitiva, Néstor come chancho para que Cristina mantenga su lozanía y juventud...

Hoy es Morales, el primer hombre de Bolivia, Evo, el que nos sugiere dejar de comer pollo y nos explica por qué. Veamos la nota:

La "Primera Conferencia Mundial de Pueblos sobre el Cambio Climático y la Madre Tierra" ha sido el escenario elegido por el presidente boliviano Evo Morales para realizar su polémico discurso. Según el presidente la calvicie de los europeos se debe a la supuesta mala alimentación que existe entre los habitantes del Viejo Continente. "La calvicie que parece normal es una enfermedad en Europa, casi todos son calvos, y esto es por las cosas que comen, mientras que en los pueblos indígenas no hay calvos, porque no comemos otras cosas", ha asegurado durante su intervención. Evo Morales también se ha referido a la homosexualidad. Según él, es una consecuencia de una alimentación deficiente. Todo se debe a la ingesta de pollo criado en grandes explotaciones industriales, que estarían cargados con hormonas femeninas. "El pollo que comemos está cargado de hormonas femeninas. Por eso, cuando los hombres comen esos pollos, tienen desviaciones en su ser como hombres", ha asegurado Morales entre las risas de su auditorio.

"O muerte del capitalismo o Madre Tierra"

Durante el encuentro alternativo promovido por el país andino, Evo Morales también ha realizado una defensa cerrada del ecologismo, hasta el punto en que planteó la disyuntiva entre la muerte del capitalismo o de la "Madre Tierra". "La humanidad está ante la disyuntiva de continuar por el camino del capitalismo y la muerte o emprender el camino de la armonía con la naturaleza y el respeto a la vida para salvar a la humanidad", ha afirmado Morales. Por todo ello Morales considera que los países ricos tienen una deuda con el resto del planeta debido a que el "espacio atmosférico" ha sido "ocupado por sus emisiones de gases de efecto invernadero", y ha defendido la creación de un tribunal internacional para juzgar delitos ambientales en la próxima cumbre climática internacional que Naciones Unidas organizará previsiblemente a finales de 2010 en México.

Reacciones inmediatas
El presidente de la Federación Estatal de Lesbianas, Gays, Transexuales y Bisexuales Antonio Poveda, ha criticado este miércoles las manifestaciones del presidente de Bolivia. Poveda ha anunciado que "pediremos una rectificación a la embajada boliviana por estas afirmaciones", que ha calificado de "barbaridad" y de "aberración" al proceder de un jefe de Estado. "La homosexualidad no es ninguna desviación, luego no puede ser atribuida al consumo de trasgénicos", ha afirmado. "Lo que el Gobierno boliviano tiene que hacer es legislar de una vez por todas para garantizar que los homosexuales y transexuales de su país disfruten de los mismos derechos que el resto". En su opinión, "es peligroso que un presidente haga este tipo de comentarios que pueden fomentar el odio hacia la comunidad homosexual". O hacia el pollo. pobre animalito de Dios.

2 comentarios:

gallega dijo...

QUIERO CREER DE EVO,QUE LO HIZO SIN PENSARLO

Milton Acosta, Òséfúnmi ti Bàáyin dijo...

Es probable, querida amiga. Pero en su posición tiene el deber de asesorarse muy bien antes de hablar. O aplicar el viejo refrán: "Mira bien si lo que vas a decir es más bello que el silencio". Creo que hay gente que habla demasiado y termina diciendo lo que no debe o quiere decir. Y mira que mi presidente no se queda atrás. Muchas veces debiera llamarse a silencio...