Parece de locos, pero no tanto...

Tan bonita estaba la flor, presidiendo ella sola su gran maceta de cerámica, que me quedé mirándola durante un rato. Tanto fijé la vista en la caléndula que, sin querer, perdí el hilo de mis propios pensamientos hasta que de pronto escuché por detrás de mí “esa flor se come“. Mi mente volvió a mi cabeza de golpe y porrazo para analizar la frase que había entrado por mis orejas: “esa flor -la caléndula- se come“, y mi primera reacción fue dudar, la segunda preguntarme “¿a qué sabrá?“ y la tercera, arrancarle un pétalo y metérmelo en la boca.

Ahora ya sé que además de ser una conocida flor de jardín de brotes rojo anaranjados, sus pétalos tienen un ligero regustillo amargo; que es muy aromática, que sus hojas más tiernas se comen en ensaladas, que se puede utilizar sus pétalos para aromatizar y colorear tortas, quesos, arroces y mantecas, y que desde antiguamente se utilizaba como sustituto del azafrán.

También sé que al tomarla como infusión, por ejemplo, nos beneficiamos de sus muchas de sus propiedades: es antiséptica, es un antibiótico natural porque estimula las células inmunológicas y todavía reduce las afecciones estomacales. Pero siempre debe usarse fresca, ya que desecada pierde todas sus propiedades medicinales. A usar caléndulas y ser felices, que de tristeza está la vida llena.

1 comentario:

PATO08 dijo...

HAY QUE LINDO NO SABIA ESTO DE LAS PROPIEDADES DE LA CALÉNDULA , NI QUE SE COMIA, AHORA VOY AHACER ARROZ AMARILLO!!! Y CUANDO HAGA LO INVITO!!!